Pues es que hay mucho que contar. Hacía tiempo que no publicaba, y es que todo se ha precipitado: muchas cosas en poco tiempo. Han pasado un montón de cosas nuevas, y no todas han sido buenas. Empecemos por ahí, ya que ha sido el primer disgusto importante que he tenido en la vida. Pues perdimos a Kai… sí, sí, una tragedia en Casa Makati. Ocurrió un jueves, pero mis padres no me dijeron nada hasta el viernes por la noche, ya que tenía examen ese día y no querían que me distrajera.

Todo ocurrió relativamente rápido. Empezó a salivar mucho y a hacer movimientos extraños, y eso era raro en Kai. Lelo y Alicia lo llevaron al veterinario y estuvo yendo y viniendo de allí hasta que, un día, ya no volvió. El impacto fue importante… piensa que es el primer perro que he tenido y le coges mucho cariño…

Pero bueno, no sigamos por ahí. Vamos a por la siguiente noticia importante, y esta ha sido muy buena. Kai dejó un vacío muy grande. Todos en Makati estábamos bastante tristes, así que papi, sin preguntar a nadie, empezó a buscar perro nuevo. Estuvo buscando a través de internet y preguntando por todos los criaderos de pastores belgas (¡cualquiera le dice que mire otra raza!) y encontró un criadero en Peñíscola. A mí no me dijo nada hasta que ya tuvimos fecha de recogida, pero tuvo que currárselo para convencer a los demás de la casa. Nadie estaba convencido de coger un perro nuevo tan rápido, ¡y menos aún de coger a dos! Jajajaj sí, sí… como si uno no fuera suficiente, va y compra dos perritas de la misma camada. Si es que a veces papi hace cosas que de primeras suenan absurdas, pero mira por dónde… ¡ahora todos estamos encantados!

Mis padres me lo dijeron con unos días de antelación y esperé con muchas ganas hasta el día de la recogida. El sitio estaba a dos horas, pero se me hizo bastante corto por la emoción… aunque, si te digo la verdad, eso de coger hembras en lugar de un macho no me acababa de convencer. Pero todo cambió en el momento de verlas. Llegamos al criadero y nos explicaron todo lo que teníamos que hacer: qué comer, cómo cuidarlas… aunque con la excitación, si te digo la verdad, no me enteré de mucho… y de repente… ¡zasca! Ahí aparecieron Kira y Lúa. Kira es un nombre que ya tenían más o menos claro mis padres; lo de Lúa fue cosa mía. ¡Qué monada! Tenían entre 3 y 4 meses… ¿te imaginas? Así que yo cogí a Kira y mami cogió a Lúa mientras papi conducía a su nuevo hogar. Qué emoción cuando las soltamos en el jardín… Ah, por cierto, todas las dudas que tenían Lelo y Alicia respecto a coger dos perritas se diluyeron como un azucarillo… ¡qué pasada! Bueno, ya llevan un par de meses en casa y la verdad es que estamos flipando. Solo duermen, corren como condenadas y comen… y vuelven a dormir: el 70% del tiempo. Lo divertido es verlas jugar, ya que al ser hermanitas parece que estén haciendo natación sincronizada…

¿Qué te parece? Bueno, es una forma de amortiguar el vacío que dejó Kai. Vamos a por la segunda noticia importante… ¡por primera vez me despego de mis padres y me voy un par de semanas al extranjero! Espera, espera, que no ha sido en plan de fiesta ni nada. Como tengo pensado irme a estudiar a USA, tengo que aprender inglés, así que me fui un par de semanas con Alejandro a Oxford. ¡Sí, como suena! Con uno de mis mejores amigos, un par de semanitas a aprender inglés y a divertirnos.

Antes del viaje fuimos a un encuentro con todos los padres y niños que se habían inscrito en el campus de English Summer. ¡La verdad es que me apetecía un montón! No explico mucho aquí en el blog porque, como mis padres lo lean y vean que explico más aquí que en casa, me matan. Vamos a ver, sí que les conté cómo fue, pero tampoco les taladré a historias… Tampoco me apetece que sepan todo, todo… jajajaja ahí lo dejo por si las moscas. Eso sí, la próxima vez haré más fotos, porque papi y mami se han quejado mucho… y más sabiendo que mi padre es un flipaooo de las fotos. Cuando le dije que no había hecho ninguna, se lo tomó a broma…

¿Qué más ha pasado? Bueno, celebré mi cumple como es habitual, ¡y como siempre, muy divertido! Somos un grupo grande, así que cada vez somos más. El año que viene ya no sé dónde los meteré. La verdad es que tengo un grupo de amigos cojonudo. Si no voy con unos, voy con los otros, y nunca me aburro. ¡Siempre hay algo que hacer! Además, ahora ya tengo mi mini independencia financiera… Vamos a ver, sigo dependiendo de lo que me dan mis padres, pero ya tengo tarjeta de crédito y esas cosas. No es que en Sitges haya mucho que hacer, pero ya sabes, con los colegas solo necesitas una esquina y nos divertimos igual. Siempre estamos de un sitio para otro, y ya mami me deja ir a más sitios y quedarme hasta más tarde.

¡Vaya tostón te he metido hoy! Muchas cosas que contar desde marzo… y te prometo que volveré a escribir más a menudo. Cuando acabe el verano, que no falta mucho, volveré a escribir con mis aventuras nocturnas, fiestas y todo eso… ¡que hay muchas novedades!